Ozonoterapia con oxígeno en el tratamiento de la fibromialgia.

Las propiedades terapéuticas de la terapia de oxígeno-ozono. La fibromialgia es un trastorno que afecta principalmente a las mujeres, se presenta en la edad adulta (pero antes de la menopausia) y se manifiesta en un dolor muscular intenso que se irradia a varias partes del cuerpo.

Es una enfermedad reumática para la que aún no existen tratamientos únicos, pero sí varios tratamientos combinados para aliviar los síntomas.

Uno de los últimos tratamientos innovadores es la oxigenoterapia con ozono, que ya se utiliza para tratar otras enfermedades y que los especialistas ven como un arma más en la lucha contra la fibromialgia.

Fibromialgia: ¿que es?

La fibromialgia es una enfermedad insidiosa: hace que los pacientes sufran dolores intensos, pero las pruebas de diagnóstico son negativas.

Se cree que los pacientes con fibromialgia tienen un umbral de dolor más bajo de lo que deberían, y los estudios han demostrado que la fibromialgia puede desencadenarse por infecciones, traumas físicos y psicológicos y predisposición genética.

El dolor causado por esta afección es constante y se localiza en los denominados puntos sensibles, puntos específicos del cuerpo que son simétricos.

Generalmente, la fibromialgia es diagnosticada por el reumatólogo, a quien luego se suma el fisiatra en el tratamiento, ya que la rehabilitación es fundamental cuando se trata de este trastorno.

Si bien medicamentos como analgésicos, antidepresivos y antiepilépticos son importantes para aliviar los síntomas, deben ir acompañados de fisioterapia.

Terapias de rehabilitación para la fibromialgia

Las técnicas que utiliza el fisiatra para el control de la fibromialgia incluyen masajes, ejercicios físicos, reeducación motora, hidrocinesis y terapias físicas como el Tens, que se realiza mediante electrodos colocados en el cuerpo para estimular las terminaciones nerviosas, y TECAR, en el que un La frecuencia electromagnética se aplica a los tejidos mediante radiofrecuencias.

Además de estos tratamientos, existen una serie de ejercicios aeróbicos que el paciente puede realizar de forma autónoma, entre los que se encuentran los ejercicios de fortalecimiento muscular, enseñados en una primera fase por el terapeuta, y la marcha.

El paciente con fibromialgia debe caminar a una intensidad moderada durante aproximadamente media hora de 2 a 3 veces por semana.

Por último, en los últimos años los especialistas también han comenzado a utilizar una terapia habitualmente utilizada en el tratamiento de otras afecciones, como las hernias de disco, en el tratamiento de la fibromialgia: la oxigenoterapia.

Esta opción puede ser de gran beneficio para el cuerpo, pero aún es poco conocida por los pacientes con fibromialgia, por lo que vale la pena explorarla más a fondo.

Ozonoterapia con oxígeno para tratar la fibromialgia

La ozonoterapia con oxígeno es un tratamiento muy eficaz por su acción antiinflamatoria, que restablece el equilibrio oxidativo del organismo.

Suele utilizarse para tratar las discopatías, ya que reduce su volumen y, por tanto, mejora los síntomas, pero varios estudios han demostrado que también es eficaz en el tratamiento de la fibromialgia.

La terapia de oxígeno y ozono ayuda a modular el sistema inmunológico y reequilibrar el sistema antioxidante en pacientes con fibromialgia.

La oxigenoterapia la realiza el fisiatra mediante una serie de pequeñas inyecciones subcutáneas en los puntos sensibles donde se desencadena el dolor, y luego se irradia al resto del cuerpo.

Por tanto, la mezcla de gas oxígeno-ozono utilizada tiene propiedades antiinflamatorias y proporciona a los pacientes una buena reducción del dolor percibido.

Por lo general, se requieren aproximadamente 10 sesiones, inicialmente dos veces por semana y luego una vez a la semana a medida que avanza la terapia.

La ozonoterapia con oxígeno es un tratamiento seguro que no causa dolor a los pacientes.

La única incomodidad que puede experimentar el paciente es un ligero ardor en el lugar de la inyección durante 5 a 10 minutos después de la administración de la terapia.

La terapia de ozono con oxígeno está contraindicada para pacientes embarazadas y aquellas con hipertiroidismo y favismo.

La escoagulación es una contraindicación relativa, no absoluta, para la cual se puede considerar la terapia tomando precauciones adicionales en el momento de la administración de oxígeno ozono, por ejemplo, aplicando hielo en las áreas de interés antes de la inyección.

Lea también:

Fibromialgia: la importancia de un diagnóstico

Artritis reumatoide tratada con células implantadas que liberan fármaco

Ozonoterapia: qué es, cómo funciona y para qué enfermedades está indicada

Fuente:

Humanitas

Quizás te interese