Desviación del tabique: ¿cómo tratar la obstrucción nasal?
La desviación del tabique nasal es una condición congénita o adquirida, generalmente como resultado de un traumatismo, que puede conducir a una obstrucción del flujo de aire en una o ambas fosas nasales, lo que resulta en dificultad para respirar adecuadamente.
En el caso de obstrucción de la respiración nasal, será necesaria la visita a un otorrinolaringólogo para valorar las causas y las estrategias de tratamiento adecuadas para ayudar a la persona a recuperar una respiración nasal efectiva.
Desviación del tabique nasal y obstrucción de la respiración nasal: los síntomas
El tabique nasal es una estructura cartilaginosa ósea que divide las fosas nasales en dos.
La desviación del tabique nasal es un desplazamiento de una o ambas porciones del tabique nasal que, por alteración anatómica congénita o adquirida de carácter postraumático, provoca una asimetría en el flujo de aire dentro y fuera de las fosas nasales.
La nariz, sin embargo, no solo tiene la función de dejar pasar el aire: también sirve para filtrar y termohumidificar el aire para proteger las vías respiratorias inferiores, es decir, los bronquios y los pulmones.
La respiración insuficiente y una reducción en la capacidad de filtración de la nariz pueden conducir a problemas en los bronquios y pulmones, asociados con rinosinusitis aguda y recurrente.
Si tiene un tabique desviado, es posible que consulte a un otorrinolaringólogo porque tiene una sensación de obstrucción nasal en una fosa nasal con más frecuencia, lo que puede empeorar en algunos casos, por ejemplo, cuando duerme o cuando tiene un resfriado.
La consulta con un otorrinolaringólogo es esencial si quiere volver a respirar bien y con eficacia.
Se utiliza una evaluación endoscópica y, si es necesario, una tomografía computarizada del macizo facial para identificar correctamente el trastorno.
Los trastornos respiratorios pueden tener repercusiones negativas en muchos otros factores que afectan la vida diaria, como:
– la calidad del sueño
– concentración en las actividades de trabajo y estudio;
– rendimiento intelectual en la escuela o el trabajo;
– vida deportiva y sexual;
- salud general.
¿Es siempre necesaria la cirugía para la desviación del tabique nasal?
La desviación del tabique nasal solo puede resolverse quirúrgicamente con septoplastia, aunque se pueden combinar terapias farmacológicas para desinflar los cornetes o resolver los síntomas de rinitis crónica o rinosinusitis recurrente.
La septoplastia es un procedimiento quirúrgico muy común que se realiza bajo anestesia general en cirugía ambulatoria.
Una vez anestesiado, se realiza una incisión en la cavidad nasal y, tras separar la mucosa del tabique nasal, se remodela y/o extrae el cartílago y el hueso desviados hasta conseguir una buena alineación del tabique nasal.
Las suturas internas están hechas de material reabsorbible que no es necesario retirar posteriormente.
Si es necesario, se puede colocar un tampón nasal al final de la operación y retirarlo a las 24-48 horas, según la técnica quirúrgica utilizada.
Después de la operación, el labio superior puede hincharse ligeramente y puede reducirse la sensibilidad de los incisivos superiores o el sentido del olfato.
Sin embargo, no hay de qué preocuparse: se trata de dolencias temporales que tienden a desaparecer paulatinamente.
Lea también:
Ketamina intranasal para el tratamiento de pacientes con dolor agudo en la DE
Enfermedades raras: poliposis nasal, una patología para conocer y reconocer
Desviación Del Tabique Nasal: Síntomas Y Tratamiento