Enfermedades de la piel: ¿cómo tratar la psoriasis?
La psoriasis es una enfermedad crónica de la piel que se presenta con formas clínicas muy variadas en cuanto a la localización y gravedad de los síntomas, por lo que presupone un tratamiento adaptado a la situación clínica individual
Cómo tratar la psoriasis
No existe un tratamiento único para contrarrestar la psoriasis, sino varias opciones de tratamiento que el dermatólogo determina según la extensión, la gravedad de las manifestaciones y la respuesta individual de la persona.
En general, sin embargo, todos los tratamientos están orientados a contener la fase activa de la inflamación y evitar el empeoramiento de la misma, ya que no es posible recuperarse por completo de la psoriasis.
Precisamente por su naturaleza crónica, la psoriasis requiere un tratamiento constante y regular, y hasta la fecha los más efectivos incluyen:
- Tratamiento tópico local
- Terapia oral sistémica o por inyección
- Fototerapia con rayos ultravioleta
- Drogas biológicas
Fármacos tópicos contra la psoriasis
La terapia tópica tradicional generalmente se usa en formas leves de psoriasis y actúa directamente sobre la piel con la aplicación de ungüentos, lociones, cremas, ungüentos y geles para reducir y hacer desaparecer las manchas.
El dermatólogo, dependiendo del estado del paciente, puede optar por un fármaco a base de cortisona, alquitrán, vitamina D, glicerina, ácido glicólico para contrarrestar la acción inflamatoria e hidratar la piel.
El tratamiento de las lesiones cutáneas seguramente hará que el paciente tenga una actitud más positiva hacia su enfermedad.
Tratamientos sistémicos tradicionales para la psoriasis
Los fármacos de uso sistémico se reservan para las formas más graves de psoriasis, para las que los tratamientos tópicos no son satisfactorios.
Estamos hablando de medicamentos que se toman por vía oral o mediante inyecciones con el fin de combatir la inflamación y el mal funcionamiento del sistema inmunológico.
Generalmente se basan en metotrexato, retinoides y ciclosporina y se acompañan de efectos secundarios leves como náuseas y molestias gastrointestinales.
Fototerapia para el tratamiento de la psoriasis
La fototerapia es un método terapéutico muy eficaz contra la psoriasis ya que facilita la mejoría clínica simplemente reproduciendo el efecto de la exposición solar sobre la piel.
Habitualmente este tratamiento se combina con terapias tradicionales tópicas y sistémicas con resultados apreciables sobre todo en las variantes más frecuentes de la enfermedad (psoriasis en placas).
De hecho, la acción de los rayos ultravioleta permite al organismo regular la formación de queratinocitos, que es la proteína responsable de la formación de las típicas placas.
Medicamentos biológicos para el tratamiento de la psoriasis
El uso de fármacos biológicos suele reservarse para casos de psoriasis especialmente severa y persistente tras otros tratamientos.
Se trata de una gran innovación terapéutica, ya que estos fármacos (anticuerpos monoclonales de tipo anti-TNF) tienen una acción directa sobre las células inflamatorias ejerciendo un efecto inmunosupresor, es decir, bloqueando los mecanismos subyacentes a la enfermedad.
No tienen efectos secundarios particulares y mejoran significativamente la condición de los pacientes con formas severas y angustiantes de psoriasis.
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