Infección por Naegleria: qué es y cómo tratarla
La infección por Naegleria (Naegleria fowleri) se contrae por exposición prolongada (varios días) al agua contaminada con el patógeno
Síntomas y enfermedades asociadas a la infección por Naegleria
Naegleria fowleri es el agente causal de la meningoencefalitis amebiana primaria (que no debe confundirse con la meningoencefalitis secundaria causada por Entamoeba histolytica), una infección aguda, fulminante y rápidamente letal que afecta al sistema nervioso central.
El diagnóstico de la enfermedad, generalmente tardío, contribuye a su alta mortalidad, de tal forma que sólo unos pocos individuos sobreviven a la infección.
¿Qué es la infección por Naegleria?
Naegleria fowleri es una ameba.
Aunque el análisis genético ha identificado alrededor de 30 especies de Naegleria, N. fowleri es la única que se ha asociado con la infección humana.
Su ciclo de vida consta de tres etapas: un trofozoíto, una etapa flagelada temporal y un quiste.
La forma que se encuentra en el sistema nervioso central y más generalmente en los tejidos del cuerpo humano es el trofozoíto; el estado flagelado es solo temporal, inducido por condiciones ambientales particulares, y regresa al estado de trofozoíto dentro de las 24 horas.
El quiste, por otro lado, es la forma resistente que le permite a Naegleria soportar la ausencia de agua y nutrientes.
Naegleria: Curas y tratamientos
Esta ameba es sensible al fármaco antimicótico anfotericina B, que parece haberse utilizado en casi todos los casos en los que la infección se ha erradicado con éxito.
Extensos análisis han demostrado que este ingrediente activo altera las membranas del patógeno, incluidas las del núcleo y el retículo endoplásmico liso y rugoso.
Sin embargo, dado el creciente número de casos en los que no ha sido efectivo, los expertos están buscando nuevos medicamentos, con la esperanza de encontrar algunos que no solo sean más efectivos, sino que también estén asociados con menos efectos secundarios.
Otras moléculas potencialmente útiles incluyen azitromicina, clotrimazol, itraconazol, fluconazol y ketoconazol. También se han probado la miltefosina y la clorpromazina.
Si se sospecha que la infección puede haber provocado un aumento de la presión intracraneal y que existe riesgo de hernia, puede ser necesaria la intervención de un neurocirujano, que puede optar por una ventriculostomía.
Descargo de responsabilidad: la información proporcionada aquí es un consejo general y de ninguna manera reemplaza el consejo médico.
Si no se encuentra bien, póngase en contacto con su médico o acuda al sala de emergencias.
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