Laringitis: síntomas, tratamiento y prevención.
La laringitis es la condición de inflamación de la laringe; es útil recordar que la laringe es la parte de la garganta responsable de la emisión de los sonidos, ya que es el asiento de las cuerdas vocales
Cuando las cuerdas vocales se inflaman, se hinchan y pueden causar ronquera y, en casos raros, obstrucción de las vías respiratorias.
Habitualmente la laringitis está provocada por el ataque de determinados virus, pero también puede darse como condición accesoria de una infección de origen bacteriano, gripe, neumonía, bronquitis o un simple resfriado.
La laringitis a menudo se puede asociar con una infección de las vías respiratorias superiores, pero normalmente no presenta síntomas de dificultad respiratoria.
Otras causas de laringitis pueden ser la parálisis laríngea, los pólipos de las cuerdas vocales, los tumores, las alteraciones de la mucosa vocal, determinados traumatismos y las alergias.
En caso de parálisis laríngea puede aparecer disnea (dificultad para respirar) de tipo inspiratorio (cuando se inhala aire hacia los pulmones), mientras que cuando se afecta la parte superior de la laringe hacia la lengua puede aparecer disfagia (dolor al tragar).
Advertencia. Cuando aparece una pérdida de la voz que persiste más allá de los 15 días, a pesar del tratamiento médico y especialmente cuando el paciente presenta factores de riesgo (fumador, bebedor de alcohol), es necesario acudir al otorrinolaringólogo.
Síntomas de laringitis
Los síntomas más frecuentes y típicos de la laringitis son fiebre, ronquera (quizás el síntoma más obvio, que se relaciona fácilmente con esta condición), infecciones recurrentes de la cavidad oral, agrandamiento de los ganglios linfáticos o glándulas en la cuello.
Exámenes y tratamiento de la laringitis.
Para formular un diagnóstico de laringitis, generalmente se requiere una laringoscopia con fibra óptica, que es un examen indoloro y muy rápido (dura unos segundos).
Se introduce una cámara de varios milímetros de diámetro por la boca o la nariz del paciente (endoscopio rígido y flexible).
De esta manera, el video del examen se puede ver y grabar y siempre se puede hacer un diagnóstico preciso.
Dado que la mayoría de las laringitis son de origen vírico, la terapia prescrita no puede basarse en antibióticos, sino que es el médico quien propondrá el tratamiento más adecuado a la situación que nos ocupa.
En cualquier caso, puede ser de ayuda mantener las cuerdas vocales en reposo para reducir la inflamación, utilizando analgésicos y descongestivos, que pueden mejorar los síntomas del ardor con la infección.
El pronóstico es bueno: en la laringitis que cursa sin complicaciones, la infección se erradica por completo sin ningún problema; solo en casos raros, cuando hay un problema respiratorio grave, puede ser necesario intervenir quirúrgicamente.
Prevención de la laringitis.
La prevención de la laringitis se basa fundamentalmente en la prevención de sus causas, en primer lugar evitando la exposición a agentes que puedan causar infecciones de las vías respiratorias superiores durante el invierno o protegiéndose de epidemias gripales; dejar de fumar ayuda a prevenir los cánceres del aparato respiratorio y, por tanto, también de laringe.
Una buena higiene de manos y abstenerse de frecuentar lugares concurridos o personas con problemas respiratorios también evita que los virus ataquen la laringe y provoquen inflamación e infección.
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