La historia de origen de las listas de verificación es la siguiente: un piloto en el 1930 bajó de un bombardero recién construido y dijo algo como "eso es demasiado avión para que una persona lo maneje". En un mundo cada vez más complicado, esas palabras hacen eco hoy en día, especialmente en el campo de la medicina. Por ejemplo, el acto de intubación conlleva muchos pasos, todos importantes: pretratamiento, inducción, intubación, planes de respaldo, confirmación de la colocación del tubo, sedación post-tubo y atención post-intubación. Una publicación escrita hace dos años por el entonces becario de Auckland HEMS Dr. Robert Gooch describe este entorno cada vez más complicado y el objetivo final de reducir la carga para los médicos.

Cuando se trata de eso, las listas de verificación se crearon por dos razones simples: para evitar un desastre o para guiar la reacción ante un desastre. Durante el período posterior al huracán Katrina, los esfuerzos de socorro tuvieron que coordinarse en escalas que iban desde el nivel individual hasta el nacional. Hubo muchas empresas privadas y servicios de rescate locales que aceptaron el desafío. Para citar a Atul Gawande en el Manifiesto lista de verificación, "Hicieron del manejo confiable de la complejidad una rutina'. Tomaron el caos y lo hicieron parecerse al orden. Un médico calificado hace esto a diario, pero surgen problemas a medida que las situaciones clínicas se vuelven desconocidas o los equipos se hacen más grandes, como un escenario inesperado de vía aérea difícil en una sala de reanimación del Departamento de Emergencias.

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