Rinitis, inflamación de las mucosas nasales

¿Qué es la rinitis? Es la irritación o inflamación de las mucosas nasales. Los síntomas típicos de esta afección son secreción nasal, picazón y congestión; estas son la respuesta natural de la nariz a la irritación y a menudo van acompañadas de un lagrimeo pronunciado

La rinitis suele durar unas seis semanas (rinitis aguda); si dura más se llama rinitis crónica

La nariz normalmente produce una mucosidad que tiene la función de atrapar gérmenes, polen, polvo y todas las demás partículas que se encuentran en el aire que respiramos, evitando que lleguen a los órganos respiratorios internos.

Cuando la producción de mucosidad es abundante, se produce una congestión y la propia mucosidad, en lugar de fluir hacia la garganta, sale por la nariz, provocando el síntoma típico de una secreción nasal continua.

Los estornudos y la picazón son la respuesta más obvia del cuerpo a la irritación nasal causada con mayor frecuencia por el humo del cigarrillo, la contaminación, el polen, el polvo y otros alérgenos transportados por el aire.

La rinitis es muy a menudo de naturaleza alérgica y se presenta en dos formas: rinitis estacional y rinitis perenne.

La rinitis estacional se presenta con la llegada del polen (es decir, en primavera, verano y principios de otoño), mientras que la rinitis perenne afecta al paciente durante todo el año y suele ser causada por hipersensibilidad a los ácaros del polvo, el moho y las mascotas.

Causas de la rinitis

Cuando una persona alérgica inhala un alérgeno, el sistema inmunitario ataca a esta sustancia, reconociéndola como extraña al organismo.

El alérgeno se une a la inmunoglobulina E, que a su vez se une a las células que producen histamina.

La histamina dilata los capilares dentro de la nariz y permite que las sustancias líquidas fluyan hacia los tejidos circundantes, lo que provoca secreción nasal, ojos llorosos, hinchazón y picazón.

Las complicaciones de la rinitis alérgica pueden ser infecciones, sinusitis, tos, dolor de cabeza, dolor de garganta, alteración del ciclo de sueño/vigilia y fatiga.

Sin embargo, no todas las rinitis son causadas por alergias.

La causa más común es el resfriado común, definido científicamente como una rinitis de origen infeccioso.

La mayoría de estas infecciones duran solo una semana y se pueden contraer principalmente en ambientes concurridos (los niños en edad escolar y preescolar son los que corren mayor riesgo).

Un resfriado comienza con una sensación de congestión nasal, acompañada de estornudos y sobreproducción de mucosidad.

El resfriado puede empeorar con la aparición de tos y fiebre, pero en una semana, como máximo dos, los síntomas desaparecen.

Otras rinitis pueden ser causadas por el uso de ciertos medicamentos, factores físicos o cambios de temperatura y humedad.

Los descongestionantes nasales son una buena solución para la acumulación de moco, pero a menudo pueden alterar el funcionamiento normal de las fosas nasales o ser adictivos.

La cocaína también puede causar rinitis porque altera el funcionamiento de la nariz peor que los descongestionantes.

Rinitis vasomotora

Existe otro tipo de rinitis, denominada 'rinitis vasomotora', que se ve afectada por olores, humo de cigarro e irritantes y químicos en general; las especias utilizadas en la cocina, las bebidas alcohólicas y ciertos medicamentos también pueden inducir esta condición.

Otro desencadenante de este tipo de rinitis es el cambio de temperatura: hay personas que tienen una sobreproducción de mucosidad cuando están en la nieve o cuando salen de habitaciones con aire acondicionado.

Evidentemente, en la sangre de estas personas no se encuentra ningún alérgeno que pueda explicar sus síntomas, ni hay inmunoglobulina E presente.

Por lo tanto, la causa aún no se comprende bien; los olores en cierta concentración pueden causar irritación nasal, mientras que para algunas personas una cantidad muy baja es suficiente para desencadenar los síntomas de la rinitis.

Por lo tanto, se cree que la rinitis vasomotora es una reacción paroxística a la reacción nasal normal a los irritantes.

Como en el caso de la rinitis alérgica, no existe tratamiento para la rinitis vasomotora; solo la prevención del contacto con irritantes puede mantener las crisis y sus síntomas bajo control.

Tratamiento

El mejor tratamiento de la rinitis es la prevención del contacto con alérgenos e irritantes de las mucosas nasales.

Si la rinitis es de origen alérgico, el uso de antihistamínicos ciertamente puede ayudar a mejorar los síntomas.

Sin embargo, se debe tener cuidado al tomar estos medicamentos, ya que inducen somnolencia, por lo que no se recomiendan al conducir o trabajar con maquinaria potencialmente peligrosa.

Otro tipo de tratamiento es la inmunoterapia.

Se inyecta al paciente una cantidad creciente del alérgeno que desencadena la alergia para que el cuerpo se acostumbre gradualmente a la presencia de esta sustancia y ya no la considere como extraña.

Las terapias locales, por otro lado, se basan en el uso de descongestionantes, generalmente en forma de aerosol, que se inhalan directamente en las fosas nasales para bloquear la sobreproducción de moco y limpiar la nariz.

Los corticosteroides también son recetados por el médico para combatir la inflamación causada por la alergia, administrados en forma de inyecciones o por vía oral.

La cirugía nasal, por otro lado, está reservada para aquellos con problemas funcionales de la nariz o sinusitis crónica.

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