Aftas bucales: qué son, síntomas, causas y tratamiento

By cristiano antonino On 24 de enero de 2023

Las aftas bucales son pequeñas lesiones de la piel, que si se forman en el interior de la boca (paladar, mejillas, lengua) o en la base de las encías, se denominan aftas orales (o estomatitis aftosa o úlcera aftosa)

La manifestación de las aftas bucales puede presentarse sola o en grupos y generalmente se presenta como pequeñas abrasiones, redondas u ovaladas, de pocos milímetros de tamaño, de color blanquecino o con un halo rojo alrededor.

No son molestias contagiosas, son muy dolorosas y en algunos individuos que padecen, por ejemplo, de estomatitis aftosa recurrente, pueden reaparecer con más frecuencia.

Generalmente duran de una a dos semanas.

¿Qué son las aftas?

Las aftas, también llamadas estomatitis aftosas o úlceras aftosas en la jerga médica, no son más que tipos muy comunes de ulceración, entre las más comunes de las infecciones de la mucosa oral.

Generalmente afectan a mujeres, pero también son habituales en la edad pediátrica.

Pero, ¿en qué consisten exactamente?

Se trata de una rotura de la mucosa oral, que puede estar precedida unos días antes por una sensación de malestar o ardor.

No solo involucran la mucosa oral, sino que también pueden afectar otras áreas del cuerpo, como las membranas mucosas genitales masculinas y femeninas y las membranas semimucosas, es decir, el prepucio: glande, labios menores y labios mayores.

Es importante destacar que las aftas bucales en los labios no son contagiosas, a diferencia de las ampollas causadas por el herpes simple.

¿Cuáles son los síntomas de las aftas?

Generalmente, los síntomas que anuncian la aparición de las aftas bucales son:

dolor a menudo acentuado especialmente al comer;
ardiente;
rojez;
fiebre si hay úlceras bucales grandes y extensas;
hinchazón de los ganglios linfáticos debajo de la mandíbula.

¿Cuáles son las causas más comunes?

Varias causas pueden ser la base de la infección; de hecho, hoy en día los orígenes y mecanismos del desarrollo de las aftas aún no se comprenden bien.

En medicina, la teoría predominante es la que asocia la aparición de aftas con estrés psicofísico, al igual que ocurre con el Herpes Simplex o fiebre labial.

Estas infecciones pueden ser el resultado de:

contacto con objetos sucios y mascotas.
traumatismos menores en la boca, como morderse accidentalmente la mejilla, alimentos ácidos o picantes, uso vigoroso del cepillo de dientes;
menstruación;
desequilibrios hormonales;
infección por Helicobacterpylory;
dieta baja en vitamina B12, zinc, ácido fólico (folato) y hierro;
síndrome de inmunodeficiencia y fármacos inmunosupresores.

También pueden ser causados por el uso de dentaduras postizas, dientes astillados o lesionados, o aún pueden ser causados por alimentos duros, fumar o frotarse con demasiada fuerza con un cepillo de dientes.

La intolerancia alimentaria, la toma de antibióticos u otras sustancias y medicamentos, los cambios hormonales durante el ciclo menstrual de la mujer, o incluso una deficiencia de ácido fólico (típica de las mujeres embarazadas), también pueden dar lugar a la aparición de estas lesiones.

En estos casos, las aftas bucales suponen una señal que da el organismo a modo de despertador y para la que conviene someterse a pruebas específicas

También pueden contribuir otros factores relacionados con la salud y la predisposición genética como la diabetes, o enfermedades de origen viral o bacteriano.

Finalmente, la presencia repetida de úlceras bucales, presentes principalmente en la mucosa de la lengua, labios y mejillas, puede ser un síntoma de estomatitis aftosa, una condición muy dolorosa pero no contagiosa.

¿Cómo prevenir la aparición de aftas bucales?

Sin duda, es muy importante seguir una rutina de higiene de la cavidad bucal, utilizando un cepillo de dientes de cerdas suaves y pasta de dientes después de cada comida.

También ayuda a prevenir la aparición de úlceras bucales evitar comer alimentos ácidos o picantes con frecuencia, como patatas fritas, especias, piña, pomelo, naranjas, frutos secos, etc.

En cambio, es recomendable comer muchas frutas, verduras y cereales integrales y beber mucho.

Como anticipábamos anteriormente, el estrés puede ser un desencadenante de infecciones, por lo que sería prudente frenar cualquier tensión psicológica o física acumulada.

Reduciendo estados de ansiedad y estrés, definitivamente ayuda a prevenir las aftas bucales.

Si tiene prótesis dentales o aparatos ortopédicos, debe cuidar su higiene e informar a su dentista de cualquier molestia o lesión.

Diagnóstico

Tratamiento y cuidado de las aftas bucales

Las aftas, en particular las aftas orales, se curan solas en un máximo de un par de semanas.

Cuando esto no sucede y experimenta mucho dolor, es recomendable utilizar:

enjuagues bucales que forman una película protectora sobre las aftas bucales que evita el contacto con los alimentos;
toques con ácido retinoico que facilita la cicatrización en menos días;
toques con gel astringente de cloruro de aluminio que estimula la reepitelización de la mucosa.

Si no se tratan, estas inflamaciones seguramente pueden empeorar, por lo que es mejor cuidarlas antes de que se vuelvan aún más dolorosas. La forma más rápida de hacerlo es aplicar una capa protectora sobre la úlcera.

Esto bloqueará el estímulo externo que puede causar más irritación e infección.

Otro remedio para las aftas bucales es como se mencionó anteriormente el uso y aplicación de enjuagues bucales con Clorhexidina, que son antisépticos y sin alcohol, actuando como barrera para proteger la herida además de aliviar el dolor.

Al usarlos incluso en pequeñas dosis cuando hay una úlcera bucal o una lesión en la boca, se cura rápidamente y tiende a no reaparecer.

Para acelerar la cicatrización y aliviar el dolor de la lesión, se recomienda evitar durante un tiempo la ingesta de alimentos demasiado picantes y ácidos, como los cítricos, las especias, las bebidas demasiado calientes, el café y el alcohol.

En cambio, se deben preferir en todos los casos alimentos ricos en fibra y vitaminas, como huevos, carnes, pescados y quesos.

Ciertamente, los remedios a tomar dependen en gran medida del tipo de úlcera bucal y del grado de intensidad y dolor.

Por lo general, de hecho, la estomatitis se resuelve espontáneamente en un par de semanas, pero es posible acelerar el proceso de curación a través de una terapia basada en los medicamentos mencionados anteriormente.